Un electroencefalograma es una prueba que detecta la actividad eléctrica del cerebro mediante pequeños discos metálicos (electrodos) fijados sobre el cuero cabelludo. Las neuronas cerebrales se comunican a través de impulsos eléctricos y están activas todo el tiempo, incluso mientras duermes. Esta actividad se manifiesta como líneas onduladas en un registro de electroencefalograma.
Un electroencefalograma es uno de los estudios principales para diagnosticar la epilepsia. Un electroencefalograma también puede cumplir una función en el diagnóstico de otros trastornos cerebrales.
Por qué se realiza
Un electroencefalograma es capaz de determinar cambios en la actividad cerebral que pueden ser útiles para diagnosticar trastornos cerebrales, especialmente epilepsia u otros trastornos convulsivos. Un electroencefalograma también puede ser útil para diagnosticar o tratar los siguientes trastornos:
- Tumor cerebral
- Daños cerebrales por lesiones en la cabeza
- Disfunciones cerebrales que pueden tener diversas causas (encefalopatía)
- Inflamación del cerebro (encefalitis)
- Accidente cerebrovascular
- Trastornos del sueño
Un electroencefalograma también puede utilizarse para confirmar la muerte cerebral en una persona que se encuentra en un coma persistente. El electroencefalograma continuo se utiliza para ayudar a encontrar el nivel adecuado de anestesia para una persona que se encuentra en un coma inducido por medicamentos.
Referencia
Mayo Clinic: www.mayoclinic.org